Seleccioná un lugar en la zona posterior del brazo.
Lavá la zona con un jabón que no sea cremoso y agua. Secá con una toalla.
Limpiá la zona con un algodón con alcohol y dejar secar al aire.
Colocá el aplicador del sensor sobre el lugar preparado y presioná con firmeza.
Ahora el sensor debería estar adherido a su piel.
Aseguralo presionando suavemente con el dedo alrededor del borde.
Presioná “Escanear sensor nuevo” en tu aplicación13 o lector
Sostené el dispositivo cerca del sensor y escanealo lentamente.
Sonará un pitido o sentirás una vibración cuando se active.
El sensor se puede usar para medir la glucosa luego de 60 minutos.
Tirá del borde adhesivo y despegalo lentamente de la piel.
El uso de un humectante suave puede hacer más fácil retirarlo.
Desechá el sensor usado y aplicá uno nuevo.
La educación
en diabetes es
la clave.
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